E ra de esperarse, Alphabet (así se llama hoy este monstruo digital),que cuenta con plataformas exitosísimas como Youtube, Google Maps, Calico, Google Capital, Google Fiber, Nest, Google Ventures, y Sidewalk Labs para mencionar sólo algunas, no podía quedarse por fuera del circuito del empleo, nicho de negocio del que Linkedin ha dado de que hablar en los últimos catorce años.
Linkedin ha probado con creces que las verticales digitales especializadas son hoy uno de los negocios más rentables, más si estos entran dentro de la denominación de redes sociales, que los pone a jugar no sólo en el negocio de la suscripción individual, sino que logra además crear jugosos espacios para la publicidad.
Linkedin fue adquirida hace un año por Microsoft en una audaz jugada de Satya Nadella que ha dejado atrás los desastrosos años de Steve Ballmer. Nadella compró por US$26billones los 433 millones de usuarios que entonces tenía Linkedin (ya va por los 500MM), las 9 millones de empresas clientes, los más de 100.000 artículos semanales de su plataforma, y los más de 10 millones de empleos ofrecidos.
Probó esta plataforma de igual manera que hoy, en el mundo digital, la marca personal es un activo de administración propia que abre la compuerta al cambio permanente, tema que hace años era impensable y que ponía al individuo a entregarle su destino a una sola empresa que fungía de agente de colocación exclusiva.
Estas plataformas democratizaron si se quiere el empleo, lo hicieron global, y armaron una red de contactos posibles que permite hoy que cualquier persona , cualquier empresa y por lo tanto cualquier empleo, esté a menos de cuatro eslabones de referidos que a veces se logra en horas.
Si bien Linkedin ha probado ser tremendamente exitoso como red, su energía, al menos últimamente, debe haber estado centrada en la integración con Microsoft porque de cara al usuario todavía tiene limitaciones. Su sistema de algoritmos es sencillo y su modelo de búsqueda poco práctico, lo que hace que sean muchos los candidatos que finalmente no son vistos ni reciben oferta alguna, y sean muchas las empresas que pasan literalmente por encima de talento idóneo sin verlos. De otra parte de cara al usuario final (empresa contratante), Linkedin no es una plataforma muy amigable lo que hace que el proceso mismo tenga que ser complementado a través de sistemas internos.
Aquí es donde entra Google Hire. Si bien no pretende ser una competencia directa, al menos no en el corto plazo como fuente de hojas de vida, su modelo de administración del proceso dará de que hablar con algunas novedades interesantes:
Hire permite construir etapas del proceso de manera particular a cada empresa. Las compañías podrían inclusive incluir pruebas para que los candidatos puedan demostrar sus competencias. Esta app permitirá no sólo agregar la posibilidad de que los entrevistadores puedan calificar a los candidatos, sino que la escala de calificaciones puede ser ajustada a cualquier parámetro deseado.
Hire permitirá a las empresas obtener un sitio de empleo en mejorado. Además, mientras las vacantes pueden ser publicadas en distintos sitios de anuncios de empleo, Hire permitirá rastrear y medir la eficiencia de cada fuente, a fin de permitir a las empresas tomar mejores decisiones en torno a los costos de inversión en cada uno de estas páginas.
A través del motor de búsquedas de Google, Hire podrá proveer más información sobre un potencial candidato de forma automática, al conseguir enlaces a los perfiles de cada persona en sitios como LinkedIn, GitHub, Behance, Stack Overflow, entre otros.
Hire permitirá recuperar información importante sobre procesos anteriores en donde candidatos viables e interesantes quedaron rezagados, pero cuya evaluación valida el volver a tenerlos en cuenta dados los cambios del perfil.
Hire estará además totalmente integrado con otras aplicaciones de la G Suite, como Gmail y Google Calendar, que son muy utilizadas por los reclutadores durante el proceso de captación y selección, y que por tanto abren la posibilidad para centralizar la información de cada candidato en un único lugar, haciendo todo el proceso más ágil y eficiente.
En este sentido, la integración entre Hire y G Suite permitirá realizar tareas como comunicarse con candidatos a través de correos electrónicos utilizando Gmail o Hire, y que estos mensajes se sincronicen simultáneamente en ambas herramientas; pautar entrevistas en Hire que puedan ser visibles en las agendas de todas las personas involucradas en el proceso de entrevistas a través de Google Calendar; e incluir información importante en las invitaciones de Google Calendar tales que puedan ser utilizadas más tarde en el proceso.
Con Hire, Google anuncia la entrada a uno de los temas más sensibles de cara al futuro del éxito empresarial, el del talento. Atraer y administrar, será sin lugar a dudas, de lejos el tema crítico a resolver si se quiere tener vigencia. La pelea apenas comienza, pero veremos a estos dos gigantes hacer propuestas de valor interesantes que sin duda cambiaran la forma en como hasta el momento de ha identificado el mejor talento.