A pesar de la evolución de nuestra civilización y por supuesto de su estructura económica, la velocidad del mundo moderno pareciera haber elevado en nivel de complejidad de las transiciones de mando; tal vez por el impacto a veces desproporcionado que tienen incluso las más pequeñas acciones, por la visibilidad del nuevo estilo de liderazgo y por unas bolsas de valores en general nerviosas frente a la capacidad del nuevo líder de hacer los virajes necesarios.
Los líderes, sin importar su nivel, son altamente vulnerables en los primeros meses de su nueva posición, porque carecen de conocimiento detallado del reto, no han desarrollado aún la red de contactos internos requeridos para sostener los cambios, y por las dificultades de generar credibilidad. El fracaso para generar “momento” en los primeros meses puede ser fatal. Estudios serios hablan de un punto de equilibrio de 6.2 meses en las transiciones, entendido este como el punto en donde el nuevo líder ha creado tanto valor como el que ha consumido de la organización.
Curiosamente y a pesar de lo trascendental de saber administrar de manera correcta una transición, hay claras evidencias de la poca planeación que las organizaciones ponen a manejarla. Algunas sugerencias que sin duda pueden facilitar el proceso:
– Prepárese Mentalmente: Uno de los más comunes errores es pensar que lo que nos ha hecho exitosos en el pasado, no servirá, sin modificaciones, de plataforma para liderar el nuevo escenario. El primer reto hacia el nuevo rol implica necesariamente la revisión de estructura personal y competencias adecuándolas para poder hacerse cargo del nuevo equipo.
– Acelere su Aprendizaje: Usted necesita subirse al tren del conocimiento organizacional de manera definida y ágil. Aprender y entender a fondo los productos, mercados, tecnologías, sistemas y estructuras así como la cultura y política interno serán pilar de poder empezar a aportar.
– Calce la Estrategia con la Situación: Usted necesita diagnosticar la situación de negocio de manera acertada, clarificando las oportunidades y los retos. El plan de negocios depende fundamentalmente de un buen diagnóstico.
– Asegúrese Triunfos Tempranos: Estos construyen credibilidad y generan un ciclo virtuoso apalancando su energía y creando una sólida sensación de que cosas buenas y diferentes están pasando en la organización. Es fundamental identificar de manera temprana oportunidades para crear valor que se puedan ejecutar con celeridad.
– Negocie el Éxito: Usted necesita identificar como construir una relación productiva con su nuevo jefe o con la Junta gerenciando de esta manera sus expectativas. Esto implica planear conversaciones críticas acerca de la situación, estilo, recursos y desarrollo personal. Generar consenso sobre estos temas es fundamental.
– Logre Alineación: El rol de arquitecto organizacional es vital. Calzar la estructura a la estrategia y desarrollar los sistemas para apoyarla es tal vez su más importante reto. Tendrá poco tiempo para definir su nueva estructura.
– Construya su Equipo: Si heredó un equipo deberá evaluarlos rápidamente y determinar si tiene los jugadores necesarios para este segundo tiempo. Su capacidad para seleccionar el equipo adecuado, tomar decisiones difíciles y reforzar su banca medirán su carácter.
– Cree Coaliciones: Su éxito dependerá en parte de su habilidad para influenciar a aquellos que no están necesariamente en su línea de control. Identifique rápidamente a aquellos cuyo soporte es esencial para lograr sus metas.
– Mantenga un Balance: Los riesgos de perder la perspectiva manteniéndose aislado son altos. Asegúrese de tener a la mano el network necesario para compartir sus dudas.
– Apoye y Acelere la Transición: El nuevo liderazgo conlleva una transición para todo su equipo. Asegúrese de acelerar, de la mano de la suya, la transición de todo su equipo. Los resultados dependerán en gran medida de que toda la organización este subida en el mismo bus. Desafortunadamente los mercados no perdonan, pero para duros e intolerantes, nosotros, los seres humanos. Nada que genere más expectativa que un nuevo comandante. Tendrá poco tiempo para adoptar un marco que le asegure con éxito la transición.